Ollanta Humala promulga
leyes del Opus Dei que controla el Ministerio de Cultura
EL Cusco hizo retroceder la privatización del 2008 al gobierno de Alan
García, ahora debemos replicar la lucha en todos los terrenos a estas maniobras
del centralismo
Los abuelos dicen toda repetición es una tragedia o es una
comedia; con ocasión ahora del DL 1198 y la Ley 30344 que afectan directamente
al Patrimonio Cultural y Natural, porque son dispositivos complementarios y
correlativos, para el objetivo de privatizar nuestros bienes patrimoniales, se
repite la historia, como en el año 2008 cuando Alan García a iniciativa de
Carlos Bruce promulgo la Ley 29164 que pomposamente se denominaba “Ley de
Promoción del Desarrollo Sostenible de los Servicios Turísticos en los Bienes
Inmuebles del Patrimonio Cultural”, acompañada como ahora en dupla por otra Ley
29167 que facilitaba las concesiones a los hoteles y restaurantes a invertir en
los complejos patrimoniales, con el sambenito de la promoción turística y la
recuperación del patrimonio cultural.
Los viejos lobos empresariales que controlan y dominan los
Ministerios de Turismo y Cultura, empujaron a García entonces y ahora empujan a
Ollanta Humala a promulgar leyes que tienen el claro objetivo de la
privatización. Como era de esperar como el año 2008, ahora aparecen autoridades
y funcionarios mediatizados y acobardados justificando lo injustificable; por
esos años repetían los mismos argumentos de hoy, que se puede colocar
“candados, excepcionalidad del Cusco, no podemos cerrar la inversión en otras
regiones, no seamos el perro del hortelano, podemos sacarle la vuelta a la ley”
supuestos argumentos que quedaron en el olvido.
LA RESPUESTA DEL CUSCO DE ENTONCES
El pueblo como siempre de manera intuitiva en unos casos y
argumentada en otros, señalo su rechazo a dichas leyes, estudiando el contexto
y los objetivos de las normas, como ahora debemos analizar. No es casual que en
apenas dos días, salgan normas que son absolutamente correlacionadas y que
tienen los mismos argumentos que el año 2008, primero desde la argolla mafiosa
del Ministerio de Cultura se allana el camino para intervenir en los bienes
patrimoniales, ahora lo hacen a través de un Decreto Legislativo y sale
inmediatamente la Ley de Ventanilla Única de Turismo que regala por
simplificación administrativa desde Lima, todas las inversiones de turismo en
la rama del patrimonio. Por eso decimos se repite la historia.
El pueblo del Cusco derrotó al Gobierno de Alan García el
2008 en estas pretensiones en todos los planos, porque enfrento el proceso
integralmente y unitariamente; en primer lugar se unificó desde la sociedad
civil y las autoridades regionales y municipales el rechazo y exigiendo su derogatoria,
tema en el que también fueron comprendidos y comprometidos los congresistas.
Propuesta acompañada por una intensa movilización de la Asamblea Regional y la
realización de varios paros regionales de 24 y 48 horas, obligando al régimen
aprista a paralizar la ejecución y reglamentación de dichas leyes.
Por otro lado a través de un equipo de abogados, se trabajó
una acción de inconstitucionalidad contra dichas leyes ante el Tribunal
Constitucional, proceso contencioso que terminó paralizando definitivamente
dichas leyes y que no fueron aplicadas, porque tampoco se aceptó participar en
su reglamentación, como ahora invitan y caen en el juego algunas autoridades y
partidos.
Ahora, si combinamos adecuadamente la movilización social,
la argumentación técnica y jurídica contra estas dos normas últimas como es el
DL 1198 y la Ley 30344, podemos enfrentar exitosamente contra estos atentado a
nuestro patrimonio, derechos que están recogidas constitucionalmente e
internacionalmente, un Decreto Legislativo por jerarquía jurídica no puede
modificar a su antojo las leyes por intereses económicos concretos; por otro
lado tampoco las partes interesadas y afectadas como nuestra región fueron
consultadas, por ello es que mañosamente no se discutió en el Congreso Nacional
que hubiera permitido saber los contenidos y alcances de la norma, el Ministerio
de Cultura clandestina y dictatorialmente nos quiere imponer una norma que
vulnera nuestros derechos.
LEY DE VENTANILLA UNICA DE
TURISMO, CIERRA EL CICLO PRIVATISTA DEL PATRIMONIO CULTURAL Y NATURAL, JUNTO AL D.L. 1198.
No es cierto que
se puedan conseguir atajos y excepcionalidades para el Cusco, en el reglamento
del DL 1198 que privatiza el patrimonio, como señalan el Director de Cultura y
conspicuos voceros del Partido Aprista en el Cusco, que son recogidos por
distintos medios.
El DL 1198 es
absolutamente complementario y funcional con la Ley Nro. 30344 aprobado por el
Congreso Nacional, que señala expresamente que será el Ministerio de Turismo y
Comercio Exterior, la encargada de administrar la Ventanilla Única de Turismo,
que tiene las funciones de expedir, renovar, certificar, modificar, calificar
las inversiones en los predios privados, comunales, públicos de carácter
arqueológico y áreas naturales protegidas, para poder desarrollar actividades
turísticas.
No es casual que
las promulgaciones se dieran de manera correlativa, necesitaban el D.L. del
Ministerio de Cultura, que todos suponemos vela por los bienes patrimoniales,
para abrir las puertas de la llamada VUT del Ministerio de Turismo, con lo cual
no solo privatizan, sino que vulneran las normas de descentralización de los
gobiernos regionales y municipalidades, por cuanto el trámite y la decisión final
se hace desde Lima y el Ministerio de Turismo, con lo que se acaba la autonomía
y las funciones del gobierno regional y las municipalidades en esta materia.
Si después de
todo ese contexto, se sigue pensando en posiciones intermedias y excepcionales,
lo que buscan es desarmar la respuesta social, legal y constitucional a que
tiene derecho el Cusco.
RESPUESTA CONTUNDEN Y
UNITARIA
Corresponde a las
organizaciones sociales y autoridades asumir la defensa de nuestros derechos;
esto significa construir y concertar posiciones de principio, sin miradas
cortas y acomodos electorales, con un pronunciamiento claro y firme de rechazo
y derogatoria de las normas, así como exigiendo la renuncia de la Ministra de
Cultura y su representante en el Cusco el Director Regional de Cultura.
En el Congreso de
la República existe una Comisión de Control Constitucional, que revisa los
Decretos Legislativos promulgados por el ejecutivo, cuando el Congreso delega
dichas funciones. Esta instancia puede y debe revisar y observar la norma
porque afecta los derechos constitucionales del Cusco particularmente. Si eso
es así, no podemos aceptar ser parte del coro del reglamento, porque de hecho
se estaría aceptando la aplicación de la norma.
El Cusco no debe
quedar desarmado y debe trabajar una acción de inconstitucionalidad contra
dicho DL y presentar la demanda ante el Tribunal Constitucional. En el plano
internacional trabajar las denuncias correspondientes ante la UNESCO y otras
entidades que velan por el Patrimonio Cultural.
Los planos
legales e institucionales, tienen que estar motorizados y canalizados por la
movilización social. Si el Cusco fue capaz de hacer retroceder al gobierno de
Alan García, teórico del “perro del hortelano” en el que se fundamentan todas
estas privatizaciones, ahora al frente se encuentra Ollanta Humala con una
gestión en retirada y marginal, por tanto es posible enfrentar y derrotar estas
maniobras de la argolla del Ministerio de Cultura y del Ministerio de Turismo.
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